En una Misa que monseñor Ernesto Giobando presidió este domingo 7 de julio en la Iglesia Catedral, la diócesis agradeció el servicio de las religiosas del Instituto Siervas de María Ministras de los Enfermos que después de 70 años de desempeñar su apostolado de cuidar por la noche a los enfermos, cerrarán su casa en Mar del Plata.
El Administrador Apostólico se refirió en su homilía a la necesidad de rezar por las vocaciones, y dirigiéndose a las religiosas destacó que “se han entregado” y les dijo “pongan sus ojos en el Señor, no dejen de contemplarlo a Él, y si bien hay que levantar la casa como cuando levantamos la carpa de un campamento -porque estamos de paso y a veces toca levantar campamento y seguir- van a dejar el mejor de los recuerdos en nuestra diócesis por su entrega generosa, su misericordia y la compasión que tuvieron por tantos enfermos en Mar del Plata.”
Las Siervas de María Ministras de los Enfermos son una Congregación religiosa femenina de derecho pontificio, fundada por Santa María Soledad Torres Acosta, a iniciativa del sacerdote servita español Miguel Martínez y Sanz. El sacerdote, siendo párroco de Chamberí (Madrid), organizó una comunidad de mujeres, siete en total, con el fin de dedicarse a la asistencia a domicilio de los enfermos del barrio. La guía de dichas mujeres era Soledad Torres Acosta, a quien las religiosas hoy consideran la fundadora de la Congregación, cuya fecha de fundación formal es el 15 de agosto de 1851, día en que las primeras religiosas emitieron sus votos.
